Por Marta Luz Ramirez Saker, mamá de Emilia González
¿Alguien te preguntó si querías hacer parte de la educación virtual?
¿Alguien te preguntó si querías dejar de ir al colegio?
¿Alguien te preguntó si querías quedarte en casa las veinticuatro horas del día y tolerar el estrés de todos?
¿Alguien te lo preguntó? No, seguro que no.
Ahora, aunque nadie te lo preguntó, tienes educación virtual, algo para lo que no estabas preparada, no te preocupes, tus profesores tampoco lo estaban. Es maravilloso ver cómo te has adaptado, cómo a pesar de los tropiezos que has tenido, te has levantado y sigues cumpliendo con todo lo que implica esta nueva etapa de la educación, para la cual nadie te preparó, ni te preguntó.
Eres una luchadora, estás abriendo camino, estás siendo pionera de una revolución donde tú eres la protagonista, solo tú. Te admiro, te admiro enormemente porque no es fácil dejar de disfrutar de la compañía de tus amigas, de las bromas diarias, del verde del colegio, de tener a los profesores siempre ahí para resolver tus dudas, inquietudes o simplemente tener una charla amena con ellos. Por esto te admiro, pero aún más, te admiro porque más difícil que no ir al colegio, es quedarse en casa las veinticuatro horas del día, y más cuando nadie te lo preguntó y más bajo las actuales circunstancias en las que se encuentra el mundo entero, circunstancias de estrés, incertidumbre y hasta de pánico, de las cuales tú no has sido ajena.
Tú, eres la protagonista de este cambio, tú eres quien lo está viviendo, serás tú quien lo podrá contar de la forma en que tú lo afrontaste, no hay una forma establecida para hacerlo, no hay una fórmula, cada cual lo vive diferente, pero el mundo está orgulloso de la forma en que lo estás haciendo, siéntete orgullosa de ti, ¡lo estás haciendo bien!
